Casablanca
Las noticias económicas son desasosegantes: no se ven estampas de anteguerra, esos financieros que se arrojaban por las ventanas, pero el torbellino nos sobrecoge. Por ahí sí que oigo de un suicidio en California. Bolsas hundidas que los agentes dicen en caída libre, expresión que te produce la zozobra del precipicio. Yo recuerdo entonces una línea de Casablanca. La recuerdo en español, puede que de los rótulos de la versión subtitulada: «El mundo se derrumba y nosotros nos enamoramos».
Etiquetas: Bogart, bolsa, Casablanca, crisis, Ingrid Bergman
Este artículo fue publicado el jueves, 9 octubre 2008 a las 6:35 y archivado en Sin categoría. Puede seguir los comentarios de esta entrada a través del RSS 2.0.
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9 octubre 2008 a 18:54
-¿A qué ha venido aquí?-A tomar las aguas-¿Las aguas en el desierto?-Me informaron malQue guión! que envidia, leches 😉
20 octubre 2008 a 19:50
Vaya descubrimiento prolífico amigo.
21 octubre 2008 a 6:11
La vida es una caja de sorpresas…