Vindicación del chocolate del loro
José Blanco ofició el lunes por la noche de anfitrión de los grandes constructores, a los que invitó a cenar en el Club 31
¿Lo habrá hecho con su dinero? ¿Qué apostamos? ¿Hay que pagarle la cena con nuestro dinero a los mismos señores que se lo quedan construyendo carreteras con sus respectivos y legítimos beneficios industriales? ¿No lo había más barato sin que el fino paladar de los constructores se vea lastimado sin remedio? ¿Puedo pedir yo una cena con el ministro y otros colegas míos pagada también con el dinero que le aportamos con cada céntimo de iva, ierrepeefe, sociedades, gasolinas y tabacos? El chocolate del loro. Pero es mío.
Etiquetas: chocolate, club31, constructores, jose blanco, loro, ministros, seopan
Este artículo fue publicado el miércoles, 22 julio 2009 a las 9:10 y archivado en Sin categoría. Puede seguir los comentarios de esta entrada a través del RSS 2.0.
Tanto los Comentarios como los Trackbacks han sido desactivados.