Reflejos distorsionados de la realidad
Veía como el tiro de cámara ponía el busto de Rubalcaba entre medias del acrónimo psoe en una tipografía algo extraña y con colores impropios de su comunicación tradicional, y una llave con tres mensajitos sobre la capacidad pedagógica del candidato. Súbitamente me acordé de aquélla canción que se llamaba Pero Qué Público Más Tonto Tengo.