Sí, el blog empodera
Carlos Carnicero, en el primero de una serie de despidos sonados, no entendía lo que hacía con su blog: «En el fondo lo que me fastidia de dejar de publicar es no poder seguir molestando a los ortodoxos del zapaterismo». Ahora, en el último despido sonado, ya lo entiende: «Soy un hombre poderoso, porque tengo este Blog del que no me puede echar nadie. Aquí mandan mis lectores. Aquí no hay favores que pagar».
22 julio 2011 a 5:04
Con lo guapa que era la maquetación que le regalamos y lo bien que se leía… qué incómoda esta última que ha colgado.
22 julio 2011 a 5:59
Esos colorcines chillones… y esas citas que alteran la visión… 🙂 En todo caso, es bastante divertida la evolución: un día descubres que eres dueño de tu destino y lo otro pierde valor.