Apuntes para la formación del perfecto objetor fiscal (XXVI)
El diario lo presenta como un pago, un favor político. De ser cierto [hoy alguien explica que no lo es, pero fíjense en el «una vez más» que sigue], sólo confirma – una vez más – la falsedad de lo que finamente y muy MBA llamaríamos propuesta de valor de los sindicatos. Pasemos por hoy, vámonos a la impunidad de los buscadores de rentas o saqueadores de las arcas del estado, que de cualquier modo pueden ser llamados:
…las organizaciones como CCOO y UGT que den cursos de formación en 2011 no tendrán que presentar “justificación documental” de los gastos corrientes (los que los convocantes de los cursillos destinen a pagar agua, gas, electricidad, mensajería, teléfono, material de oficina, vigilancia o limpieza, entre otros). De esta cuestión también se beneficiarán las administraciones públicas.
La última línea es enigmática: «también se beneficiarían las administraciones públicas». Pero ¿cómo? ¿de qué se benefician si se supone que su beneficio es disponer de recursos para administrarlos, aunque sean de más?. ¿No será que hemos llegado al curioso juego de la pelota donde unos a otros se rebotan el dinero y viven de un dinero que no es suyo sin importar su límite?
Etiquetas: CC.OO., UGT, ¡al saqueo!