Hace un año…

…pensé que intentar correr un poco le vendría bien a mi descontrolado peso. Compré unas – malas – zapatillas y con mucha investigación por la red encontré la forma de empezar a trotar sin crear riesgos cardiacos en un hombre de 47 años. Doce meses después he perdido entre cinco y seis centímetros de cintura, una cantidad que no sé determinar de kilos pero son varios, he pasado de trotar miserablemente y con síntomas de patetismo a correr con elegancia durante hora y media sin que se me deshaga el cuerpo o caer desfallecido roto por agujetas y desfondamiento. He pasado frío, espantosos dolores de tibias, se me han inflamado las rodillas hasta que un día, por fin, sentí que corría normal: súbitamente fue como si un motor oxidado funcionara de modo respetable a pesar de su antigüedad. He visto como me pasaban corriendo a velocidades humillantes mientras yo sentía que no podía ir a más. Ahora, suelo ver que pasados los primeros tres kilómetros muchos no siguen mientras yo continúo. Puedo correr cinco kilómetros en menos de media hora, lo que no era en absoluto esperable. Y compruebo que mi frecuencia cardiaca ha bajado algo. Me han desaparecido los problemas metabólicos y no recuerdo mis tradicionales problemas con la gota. He corrido por Madrid, Vitoria, San Sebastián, Sevilla, Blanes, Calpe, Mondragón y Bogotá: ver las ciudades corriendo a horas tempranas te crea otra relación con ellas. En Sevilla, me perdí tratando de regresar.

Así que voy a por otro año.

3 Respuestas a „Hace un año…“

  1. Isabel Dice:

    Enhorabuena!
    Parece que engancha, como dice un amigo suyo. Yo, de momento, me quedo con la bici.

  2. Gonzalo Martín Dice:

    Bueno, lo de Albert es un caso clásico de adicción.

    Por cierto, observo que la URL ha quedado como «hace un ano». Creo que mejorará profusamente el SEO de este blog.

  3. La vida imita a la comedia | Criticidades Dice:

    […] malo de correr no es que termines pareciéndote a Enrique Pastor, concejal de juventud y tiempo libre, es que […]