Canciones de nuestros padres (ix)
En el momento del asesinato de Rodrigo Lara su hijo jura matar a los responsables. Tenía ocho años. En el momento del abatimiento de Pablo Escobar, autor intelectual del asesinato de Rodrigo Lara, su hijo de dieciséis años jura vengar su muerte.
Mientras la viuda de Pablo Escobar negocia su tranquilidad traspasando las propiedades del antiguo jefe del cartel de Medellin a los vencedores de la guerra de los narcos y el estado contra El Patrón, tiene que convencer a los capos del cartel de Cali que no maten a su hijo: esperan que el muchacho se organice lo suficiente para vengar al padre.
Años más tarde, y gracias a un documentalista, Sebastián Marroquín, el nuevo nombre del descendiente de Escobar, decide escribir a los hijos de los fallecidos por las balas de su padre Rodrigo Lara y Luis Carlos Galán. El ejercicio emocional es intenso pero, esencialmente, todos concurren en que su primera reacción no tiene sentido.
El meme, estaba ahí.
4 marzo 2015 a 7:14
El hijo del político corrupto se enfrenta a la sombra del padre corrupto: