Vulgaridades
miércoles, 9 diciembre 2009
«Los políticos no saben qué hacer ni con la Red ni con la TV cuando la vulgaridad, es uno de los derechos del español.»
Quizá porque la vulgaridad no debiera ser competencia de los políticos.
«Los políticos no saben qué hacer ni con la Red ni con la TV cuando la vulgaridad, es uno de los derechos del español.»
Quizá porque la vulgaridad no debiera ser competencia de los políticos.
Todas las máquinas tienen un botón para apagarlas. Encuéntrenlo. A mí me encanta apagarlas a veces para pensar.
Tiene que ver con nuestra vida: apaguen la tele si creen que lo que ven no es limpio, decente o inmoral; cierren el wifi en cuanto piensen que ha concentrado demasiado sus entendederas. Pero vuelvan después.
Es cierto que hay que dar al espectador lo que quiere, pero con moderación
No es necesario que diga que Gran Hermano me parece una chorrada. ¿Y qué? A mí me encanta el fútbol, que, en esencia, es también una chorrada. Sí, Gran Hermano contiene altas dosis de basura, pero Milá, con sus excesos y su goce, la transforma en farsa. Gran Hermano es eso tan asqueroso y entretenido que llamamos televisión.